CHAMONIX - ZERMATT ( La Clásica )

Llevabamos hora y media esperando dentro de ese avión cuando salió el piloto y nos dijo que el vuelo estaba cancelado por causa de la huelga de controladores franceses. Este era el primer intento en serio de hacer la Cham-Zrmtt después de años dándole vueltas al asunto sin conseguir nunca coincidir con nadie.

Así que derrotado antes de empezar me volví a mi casa
con la intención de refugiarme en la cama y llorar durante
varios días.

 La Semana Santa del 2012 no podía ser más nefasta:
llovía y llovía todos los días mientras yo buscaba y buscaba en foros y webs otra posibilidad de viajar a Alpes, al final de la
semana por fín el cielo se abrió y de nuevo brilló el sol.

El 21 de abril estaba en Chamonix con un día no demasiado radiante.
Formabamos un grupo multieuropeo y comenzamos subiendo a los Grand Montets para acceder al refugio de Argentiere pero la parte superior del teleférico estaba cerrada por el viento y nos toco subir con pieles desde el Lognan. Tras una noche movidita amaneció nevando y con ventisca, medio metro de polvo nos esperaba en la puerta del refugio, con este riesgo de aludes optamos por bajar, esquiar en Montets y "tomorrow it´ll be tomorrow" como decía Matt.


No me lo podía creer: el lunes por la mañana estaba nevando en Chamonix. El transfer nos esperaba en la puerta de la gite para trasladarnos a Verbier, esta segunda etapa la haremos por carretera, según nos fuímos adentrando en Suiza las nubes se fueron despejando y cuando empezamos a subir con las pieles hacia el collado de Montfort con el sol dominaba el cielo.
Encontramos una una nieve en polvo excepcional hasta la cabaña de Pratflouri.








Las siguientes etapas transcurrieron con relativa normalidad: de Pratflouri a la cabanne de Dix y de Dix al refugio de Viggnetes.
El jueves nos saltamos la cabaña de Bertol para llegar tras 11 horas de subibaja a Zermatt.

Fue el fohën que sopló con intensidad a partir del miércoles el que transformó la nieve dejando una masa pesada dificil de esquiar; llegó a trastocar tanto el tiempo que tuvieron que suspender la "Patrouille des glaciers", famosa carrera de esquí-alpinismo que se celebraba durante esa semana en sentido contrario al nuestro.














El viernes que teníamos libre lo dedicamos a esquiar: desde el kleine Matterhorn bajamos por un fuera pista excepcional que pasando por detrás del Breithorn llega, tras una breve subida, al collado entre el Castor y Polux, de aquí se accede a un impresionante glaciar.Primero bajamos por fuertes palas entre seracs, después bajo puentes de hielo en la parte baja del glaciar y finalizamos esquiando por un angosto desfiladero sorteando el tumultuoso torrente que discurría bajo nuestros pies, total 10 km. de bajada hasta Zermatt.

Solo me queda agradecer a Glen, Matt y Beni su paciencia por "my litlle english" y felicitar a Pascal y Jean Marc por soportar mi estambótico frances.

PD: Se agradecen los comentarios.